La mayoría de las aves rapaces lesionadas que rehabilitamos acuden a nosotros cuando los miembros del público encuentran un ave lesionada y se toman el tiempo de llamarnos. ¡Agradecemos tener esos ojos cariñosos por ahí! Dado que contamos con el apoyo de la comunidad, contamos con una red de voluntarios para ayudar a las personas que llaman a llevar aves a nuestras instalaciones si el buscador no puede atrapar o transportar el ave. Mantener el contacto visual con el ave hasta que nuestro voluntario pueda llegar es fundamental.
La captura y el transporte de aves rapaces no debe tomarse a la ligera debido a posibles problemas de seguridad tanto para el ave como para el buscador. Los voluntarios que pertenecen a nuestro equipo están capacitados en cómo manejar aves en circunstancias inusuales, teniendo en cuenta la seguridad de ambos. Muchos mantienen un kit de automóvil (contenidos sugeridos aquí pronto) para ayudarlos en la captura.
No intente capturar o recoger un ave de rapiña herida (o una garza u otras aves de pico largo y puntiagudo) sin hablar primero con un rehabilitador de vida silvestre. Puede significar la diferencia entre SU lesión y su seguridad.